viernes, 4 de junio de 2010

El cúmulo esperado




La vida es un cúmulo… un cúmulo de sensaciones, de vivencias… un cúmulo de desgracias y alegrías… un cúmulo que en ocasiones tenemos la fortuna de vivir y disfrutar junto a quienes más queremos.

Cuando he ido avanzando en mi camino, me he dado cuenta de que había alguien sobre mí… en un hermoso cúmulo, iluminado por su rostro, que me tendía su mano para ir en su compañía descubriendo nuevos horizontes, marcando nuevas metas y aprovechando nuevas oportunidades.

No dudé en agarrar esos delicados dedos, que me alzaron y me alejaron de la fría ciudad a un clima cálido y acogedor, donde de su lado he podido aprender y he logrado encontrar lo que unos llaman y otros denominan la felicidad.

Pocas son las palabras que se pueden necesitar para describir un sentimiento que, reflejado en unos ojos tan hermosos no pueda ser descrito con esa viva imagen.

Por su parte, en una conversación que tuvieron, él la dijo, intentando reflejarlo de algún modo:

“Yo tendré que llevar el peso durante una vida de ser dueño de mí mismo, pero me gustaría que tú fueras la cuidadora que me ayudase a levantar parte de esa carga”



1 comentario:

  1. Me dejas sin palabras con cada entrada que haces... no se ni que escribirte... así que espero que aunque sea una estupidez no te moleste mi comentario, un saludo.

    ResponderEliminar